Y muere noviembre dando vida a diciembre...
Comienza ya el último mes del año y a mi me da la sensación de haber quemado los once anteriores en un simple parpadeo...
Año distinto, complejo, farragoso, difícil... Duro
Y mañana es día uno y se da el pistoletazo de salida al mes de las celebraciones y los eventos...
Muchas fechas en rojo en el calendario...
Ya hay luces y adornos navideños colgando de ventanas, escaparates y edificios anunciando con villancicos y árboles de navidad gigantes el principio del festival de festejos...
Se avecinan jornadas de comer en abundancia, beber copiosamente, comprar con opulencia... y la familia.
Todo en exceso...
Es una época inquietante en la que todo el mundo sonríe como narcotizado y sus palabras expenden cheques de buenas intenciones que su alma no puede pagar.
Me encantaría rebajar un poco el porcentaje de besos, abrazos y felicitaciones navideñas para guardarlas y repartirlas durante el resto del año con toda esa gente a la que cubres con olvido e indiferencia los trescientos treinta días que suman los once meses restantes
Sueno renegado como diría mi madre pero no es real...
Imagino que todo sea el resultado de casi diez años trabajando en una juguetería, repartiendo ilusión, diez horas diarias durante los treinta y siete días que duraba la campaña soportando esos buenos ciudadanos convertidos en demonios cuando atraviesan las puertas de cualquier comercio...
Y a mi me encantaba mi trabajo pero toda esa predisposición hacia la paz en los pueblos del señor mutaba en irreverencia y malos modales ante la presión del último suspiro...
Aun así...
Nunca han sido mis fiestas favoritas quizás porque mi ego se negaba a rivalizar con el hecho de compartir el mes de nacimiento con el hijo de Dios... y el de mi hermana.
En poco mas de quince días soplaré las velas de mi cuatro veces diez y miraré a los ojos al tópico de la crisis que te viene al cruzar esa puerta...
No me da miedo su idea creo que ya la crucé, como siempre en mi vida, a deshora y antes de tiempo...
Las palabras se han enrevesado y agriado la pagina y de corazón digo que no era esa mi intención y que la mañana aunque velada por la niebla no se presenta tan fría y oscura como se podría desgranar de estas letras...
Muchas pinceladas someras a temas con mas desarrollo...
Sera mejor dejarlo aquí y continuar otro día...
Quizás otro día...
