top of page

Our Recent Posts

Tags

Sinestando

Y cuando te has rendido y has asumido que vas a estar solo por convencimiento y no por las circunstancias es cuando te encuentras preparado para empezar de cero y encontrar de nuevo esa compañía que no buscas...

Y así, sin esperarlo, sin querer, sin aspiraciones, te encuentras con otra persona que habita en tu mismo punto vital y todo te empuja a complicarte la vida pero con la lección aprendida de descomplicarla...

Dos almas con un mismo objetivo claro y sin más pretensiones que disfrutar del momento sin agobios ni presiones que amarguen el sabor de los besos sentidos...

Dos seres humanos con un nivel de complicidad tan alto que parecen dos pedacitos de la misma estrella creando su propio mundo alejados de presiones externas que interfieran en su ecosistema perfectamente imperfecto.

Y te dejas llevar por el momento.

Sin nombres.

Sin prisa.

Despacio...

Sin límites.

De frente.

Ilusionado...

Te sientes como un niño inocente que abre un regalo de navidad sin influencia de antiguos diciembres pasados aguados por las decepciones amontonadas en tu archivo de vivencias.

Ahora que has asumido tus errores, defectos y manías sientes la fuerza para admitirlos en el resto de mortales y aceptar que la perfección es tan irreal como efímera y que en ese sencillo precepto es donde reside la base de cualquier relación interpersonal sana que exista en el mundo.

En ese momento entiendes la necesidad de disfrutar de ese viaje que se te plantea y ahogas la prisa de llegar a ningún destino con toneladas de felicidad de ir descubriendo paisajes nuevos a cada tramo del camino juntos.

Has aprendido del pasado y no vas a sacrificar dos individualidades porque no crees que sea sano ni necesario hacerlo para formar una palabra que os una y te das cuenta de la genialidad de la libertad compartida porque entonces es cuando encuentras ese equilibrio natural que debe tener cualquier hecho en el mundo...

Sinestando...

Hablar y escuchar...

Poner las cartas boca arriba y abrir tu corazón sin cadenas atadas por el pavor irracional al dolor convencido por la poética idea de que la verdad te hace libre y que mejor sangrar por heridas de sinceridad que por yagas de mentiras.

Ya me quité, convencido, esa coraza oxidada por la humedad del miedo ayudándome de tu sonrisa...

Y en ese punto inicial dentro del paréntesis de media vida de nuestra historia apareció esta canción que mi colega Fabián publicó en 2007 dentro de su disco "Esperando la primavera" simplificando descriptivamente de una manera perfectamente sencilla el momento común de nuestras vidas dentro del universo... "Paginas tuyas"

Entrada individual: Blog_Single_Post_Widget

©2018 by Los "Lloros" de Jonatan. Proudly created with Wix.com

bottom of page